El sector privado tiene un papel indispensable que desempeñar en la promoción de la adaptación al cambio climático y la construcción de la resiliencia. La necesidad de que las soluciones del sector privado para abordar los impactos del cambio climático es aún más pronunciada en África, dada su considerable de las necesidades para la adaptación y el limitado espacio fiscal de la mayoría de los estados Africanos para adaptarse y aumentar la resiliencia al clima y a los riesgos de desastres.
El sector privado tiene un papel indispensable que desempeñar en la promoción de la adaptación al cambio climático y la construcción de la resiliencia. La necesidad de que las soluciones del sector privado para abordar los impactos del cambio climático es aún más pronunciada en África, dada su considerable de las necesidades para la adaptación y el limitado espacio fiscal de la mayoría de los estados Africanos para adaptarse y aumentar la resiliencia al clima y a los riesgos de desastres. Sin embargo, la movilización de la inversión privada en la adaptación es complicada por la dificultad para las empresas de la medición y de la internalización del coste de oportunidad de no adaptación, y por la limitada práctica de conocimientos sobre la solvencia y la rentabilidad de soluciones de adaptación. En este artículo se intenta llenar algunos de estos vacíos de conocimiento, primero mediante la evaluación de los costos económicos de las inundaciones y sequías – los dos más económicamente y socialmente perjudicial desastres naturales en África; y la segunda mediante la medición de las iniciales de las inversiones privadas necesarias en cada país Africano para compensar las pérdidas inducidas por estos desastres, suponiendo que dichas inversiones podrían generar un suficiente retorno económico.